Hampton Inn by Hilton New York Times Square

El hotel ofrece una experiencia urbana de primer nivel, siendo su característica distintiva su proximidad directa a Times Square y al distrito de teatros de Broadway, lo que lo convierte en una opción excepcional para turistas y aficionados al teatro. Su ubicación central es constantemente elogiada, permitiendo a los huéspedes explorar fácilmente muchas de las atracciones icónicas de la ciudad de Nueva York a pie. Si bien el hotel es generalmente alabado por su ambiente moderno y limpio y su personal amable, un desafío recurrente destacado por los huéspedes son los importantes tiempos de espera para los ascensores, particularmente durante las horas pico. Las habitaciones a menudo se describen como compactas, pero cómodas y bien mantenidas. Este hotel es particularmente adecuado para parejas y viajeros solos que buscan comodidad y un ambiente vibrante de la ciudad. Para familias, el tamaño de la habitación podría ser una consideración, aunque la ubicación sigue siendo un gran atractivo. Para mejorar su estadía, los huéspedes recomiendan planificar el uso del ascensor fuera de los horarios de mayor actividad por la mañana y por la noche, y llegar temprano para el desayuno para asegurar un asiento.

Una preocupación frecuente e importante para muchos huéspedes gira en torno al sistema de ascensores, que a menudo genera tiempos de espera considerables, especialmente durante los períodos de mayor actividad, como el check-in, el check-out y las horas de desayuno. A pesar de un sistema de asignación de alta tecnología, los huéspedes informan retrasos de 10 a 25 minutos, a veces incluso más, lo que genera frustración y la necesidad de usar las escaleras desde los pisos inferiores. En una nota más positiva, el hotel cuenta con un popular bar en la azotea que ofrece agradables vistas, aunque algunos huéspedes señalan que puede ser exclusivo o tener horarios limitados. Los huéspedes también aprecian la disponibilidad de Wi-Fi gratuito en todo el establecimiento, lo que garantiza la conectividad. Otras comodidades convenientes incluyen máquinas de hielo y dispensadores de agua en varios pisos, y un gimnasio bien equipado para aquellos que deseen mantener sus rutinas.

Los huéspedes generalmente encuentran que las habitaciones están limpias y son modernas, y a menudo notan una sensación recientemente renovada. Sin embargo, un tema constante en las evaluaciones es el tamaño compacto de las habitaciones, que algunos huéspedes describen como muy pequeñas, con espacio limitado para el equipaje o el movimiento, especialmente para más de uno o dos ocupantes. A pesar del tamaño, las camas son frecuentemente elogiadas por ser cómodas, lo que garantiza una noche de sueño reparador. Los baños se describen típicamente como limpios y renovados, aunque algunos los encuentran pequeños con un espacio mínimo en el mostrador. Los niveles de ruido son una experiencia mixta; si bien la ubicación central del hotel puede generar algo de ruido de la calle, muchos huéspedes informan habitaciones sorprendentemente tranquilas. Sin embargo, una queja común es el ruido del aire acondicionado, que algunos encuentran perturbador, incluso cuando está apagado o configurado a una temperatura más alta. Las habitaciones están equipadas con una mini-nevera, un microondas y una cafetera, lo que aumenta la comodidad de los huéspedes.

El hotel ofrece un desayuno de cortesía que es ampliamente apreciado por su inclusión y variedad, lo que ayuda a los huéspedes a comenzar el día sin costo adicional. El menú de desayuno generalmente incluye opciones frías y calientes, como huevos, tocino, salchichas, waffles, cereales y varios tipos de pan. Sin embargo, el comedor se describe con frecuencia como abarrotado y caótico, especialmente durante las horas pico de la mañana (8-10 AM). Muchos huéspedes informan dificultades para encontrar una mesa, a menudo recurriendo a comer de pie o llevar comida a sus habitaciones. Si bien la calidad de la comida se considera generalmente aceptable para una oferta de cortesía, algunos huéspedes la encuentran básica o repetitiva. El hotel también ofrece café y té en el vestíbulo durante todo el día, lo cual es una comodidad para los huéspedes.

La ubicación central del hotel se destaca constantemente como su mayor activo, colocando a los huéspedes directamente en el corazón vibrante de Times Square. Esta excelente posición ofrece una accesibilidad incomparable a numerosas atracciones principales, incluidos espectáculos de Broadway, el Rockefeller Center y varias opciones de compras y restaurantes, todo a poca distancia a pie. El hotel también está convenientemente ubicado cerca de varias estaciones de metro, lo que brinda una excelente conectividad con otras partes de la ciudad de Nueva York, como Central Park y el Empire State Building. Si bien el área inmediata es bulliciosa, el hotel en sí generalmente se considera seguro. El estacionamiento está disponible, generalmente a través del servicio de valet, pero los huéspedes señalan con frecuencia que es caro, y algunos han experimentado retrasos o problemas con la recuperación del vehículo.

El personal del hotel recibe constantemente grandes elogios por su amabilidad y servicialidad, lo que contribuye significativamente a una experiencia positiva para los huéspedes. Muchas evaluaciones destacan el servicio atento brindado por la recepción, que a menudo se describe como acogedora y eficiente durante el check-in y el check-out, a pesar de los retrasos ocasionales. Los huéspedes aprecian la disposición del personal para ayudar con diversas solicitudes, desde proporcionar toallas adicionales hasta ofrecer recomendaciones locales. El personal de botones es particularmente elogiado por su excelente servicio, especialmente al ayudar con el almacenamiento de equipaje y los arreglos de transporte. El equipo de desayuno también recibe menciones positivas por su arduo trabajo en la gestión del concurrido comedor y el mantenimiento de los artículos reabastecidos. En general, el equipo del hotel se destaca por su compromiso de brindar una estadía agradable y complaciente.

Los huéspedes deben estar al tanto de ciertos aspectos operativos que impactan su estadía. El servicio de limpieza generalmente se proporciona cada dos días, en lugar de diariamente, lo que algunos huéspedes encuentran inconveniente, especialmente con respecto al cambio de toallas. Ha habido casos de depósitos inesperados que se cobran al llegar, lo que puede ser una sorpresa para los huéspedes que no anticipan este costo adicional. El sistema de aire acondicionado, aunque está presente, se cita con frecuencia por ser ruidoso y, a veces, difícil de controlar, lo que hace que las habitaciones se sientan más cálidas de lo deseado. Además, algunos huéspedes han informado haber experimentado falsas alarmas de incendio, ocasionalmente durante las últimas horas de la noche o las primeras horas de la mañana, lo que causa interrupciones. El vestíbulo del hotel puede volverse muy concurrido debido a su diseño y al gran volumen de huéspedes, particularmente durante las horas pico.